
Una tercera hipótesis lo identificaría como parte de un monumento erigido a Sandon, divinidad protectora de la ciudad de Tarso en Cilicia.
Sabemos que hasta el siglo III d.C., existía en Tarso un imponente monumento en el que Sandon era representado en posición erecta sobre un león alado. Por ende, se podría suponer que el León de San Marcos fue en principio un grifón con cabeza de león producido durante el primer helenismo oriental entre fines del siglo IV e inicios del siglo III a.C.